Lo más probable es que ya hayas escuchado acerca del renting. En esencia, el renting es la opción de disponer de la maquinaria que necesitas sin tener que comprarla: a cambio de una contraprestación al propietario, obtienes la tenencia temporal de ese bien.
Pero claro, a mayor valor económico del producto, mayor complejidad en la negociación: no es lo mismo rentar una bici por unas horas para pasear por la playa que rentar maquinaria industrial o material imprescindible para la operación productiva de tu empresa.
Por suerte, en Driven Capital contamos con expertos que te asesorarán y te ayudarán en todo el proceso de renting de maquinaria para empresas.
Sin duda, la maquinaria y el material que permiten a las empresas y a los autónomos llevar a cabo su actividad productiva son una parte vital de su costo operativo y, más allá de eso, los costos de financiación que se deben tener en cuenta para el acceso a estos bienes; sea por compra, renting o leasing pueden influir, no solo en el costo operativo sino también en aspectos tributarios y contables.
Cuando hablamos del acceso a la maquinaria o al material que una empresa o un autónomo requieren, el contrato, la financiación y la letra pequeña cuentan y, mucho. Nuestra misión, en Driven Capital, es ofrecer la mejor financiación a nuestros clientes y permitir su crecimiento sin barreras financieras.

Un alquiler simple en un mundo complejo
El renting es un alquiler operativo que, a diferencia del leasing, no tiene opción de compra. La renta que pagas por el usufructo de los bienes rentados, no se suma a un hipotético pago, en caso de querer comprar el bien rentado. Ahora bien, si tu situación es óptima para rentar, hay muchísimas y muy buenas razones para hacerlo. Y, con un buen asesoramiento, rentar puede ser mucho mejor que comprar o hacer Leasing.
Driven Capital te ofrece financiación en renting de 24 a 120 meses, fuera de balance y de la Central de Información de Riesgos del Banco de España (CIRBE), sin costes añadidos.
Razones para optar por el renting
1 El mundo es complejo
La principal razón para rentar se resume en que el mundo es complejo: varias situaciones inesperadas se nos presentan a diario: las condiciones climáticas, de mercado, con su oferta y demanda, cambian constantemente y, en ocasiones, no nos favorecen. De la noche a la mañana, se puede reducir la demanda de tus servicios o productos. Pero tanto si estás en plena producción como si no, las facturas mes a mes no te dan espera.
2 Obsolescencia
La industria moderna se centra en la especialización, principio mismo de la producción en masa. Las herramientas y los materiales que componen la cadena productiva reflejan esa especificidad. En las líneas de maquinaria industrial, por ejemplo, existen robots que se encargan de hacer siempre, exactamente, la misma soldadura o poner los mismos tornillos, idéntico torque y ese principio aplica a toda actividad productiva.
Esto es muy positivo porque nos ha permitido llegar a niveles de productividad sin precedentes en la historia. Pero también tiene un aspecto negativo: la maquinaria y el material que demanda tu actividad productiva están en constante cambio y, lo último y más eficiente hoy, puede ser obsoleto en cinco años o menos.
3 Externalizar costes
El costo de devaluación más grande, siempre lo recibe la empresa que compra algo nuevo porque, luego, para cambiarlo, tiene que venderlo. Afortunadamente, en España, por ley, los arrendadores de maquinaria y material industrial tienen la obligación de proporcionar mantenimiento y reemplazar el equipo, en caso de daño.
A nivel de contabilidad, los arriendos son operaciones fuera del balance y no se consideran deuda, sino gasto deducible fiscalmente. Además, si realizas tu contrato, a través de Driven Capital, el arriendo no aparece en CIRBE. También pueden ser operaciones concertadas con entidades fuera del pool habitual de los bancos españoles lo que evita que las entidades tengan constancia del incremento de la deuda.
4 Todo Cambia
El mundo es complejo, lo mires por donde lo mires, lo cierto es que la única constante es el cambio: la geopolítica, los ciclos económicos, los tipos de interés bancarios, el software, el hardware, los materiales, la salud pública, los hábitos de consumo… Todo cambia. Cuando rentas la maquinaria y el material que tu empresa o negocio requieren en sus procesos productivos, te sitúas en una posición más favorable al cambio. Ante la evolución, siempre puedes rentar maquinaria y material adaptado a la nueva situación.
Y entonces, ¿rentar es la única opción a tu disposición?
Las necesidades y situación de cada empresa son únicas y, por tanto, rentar no es necesariamente la única opción. En Driven Capital, estamos plenamente dispuestos a asesorarte para encontrar la mejor financiación posible en la adquisición de la maquinaria y el material que tu empresa o negocio requieren para su operativa. ¿Te ayudamos?